¡Buenas tardes!
Sólo quedan dos semanas para terminar el cuatrimestre y eso se palpa hasta en el ambiente. La última gran ocurrencia de nuestros profesores (muy simpáticos, ellos) ha sido que realicemos cuatro cuadros, así que no queda otra: mucho café y restarle horas al sueño.
Por este mismo motivo, quería mostraros uno de mis proyectos, tal vez sea al que más cariño le tengo. Se trata de una serie de ilustraciones, las cuales pasarán a ser litografías, de la obra de teatro Cyrano de Bergerac (escrito por Edmond Rostand y estrenada en el teatro de la Porte Saint-Martin en 1897).
Ahora queda poco para que este proyecto llegue a su fin, y en una mezcla de entusiasmo y melancolía, ya estoy planteándome de qué modo podría seguir avanzando en este mismo proyecto. De momento, sigo trabajando en la idea (mientras se seca la pintura de los cuadros...), creando ilustraciones nuevas, buscando fuentes en las que inspirarme y bebiendo litros y litros de café. Espero que disfrutéis de las imágenes.
Un beso!
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